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27 nov 2009
UPyD: Qué Será, Qué Será, Qué Seráaaa
Recuerdo que cuando era adolescente me gustaba escuchar al cantante José Feliciano, y de entre todas sus canciones algunas muy reconocidas y seguidas, de aquellas había una que sobresalía y que me dejó una grata e inolvidable huella que ha perdurado hasta ahora, pero es curioso que hacía años que no me acordaba de ella hasta que nació el partido de Rosa Díez, pues dado su manera de nacer, su mezclas de ideologías y su práctica diaria me retrotrajo a esa época donde durante un tiempo llegué a tararear la canción hasta en el vater . El autor comenzaba así: Pueblo mío que estás en la colina, teeeendido como un vieejo que se muere, laaa pena y el abandono, son tu triste compañía, pueblo mío te dejo, sin alegría… Qué será, que será, qué seraáa, que seráaaa deee mi vida, quéee seráa, si se muucho o no sé nada, ya mañana se veraa, y será, será, lo quee seráaa, ya mis amigos, se fueron casi todos, yyy los otros partirán después que yo, lo siento porrque amaba su agradable compañía, más es mi vida y tengo que partirrrr, que será, que será…,
Y alguien se puede preguntar que qué relación puede tener UPyD (o lo que es lo mismo, Rosa Díez, pues ella sola es todo UPyD) con ésta canción, pues espero que al final de mi relato lleguen a la misma conclusión que he llegado yo, creo que mucho si vemos no solo con la equidistancia con la que han actuado en los temas políticos, económicos, laborales y sociales importantes (y que no fuera su monotema recurrente contra el terrorismo, ahora en horas bajas, y los nacionalismos y las lenguas cooficiales junto a los estatutos de autonomía que tanto juego le está dando) sino con la indefinición ideológica por la que ha apostado después de cerrar su I Congreso. Cualquiera se dará cuenta que la duda del “que será, qué será, UPyD” ha quedado patente, pues ha sido “no” resuelta, supongo, que por aquello de que será, lo que será. No será ni de izquierdas ni de derechas nos dice la aprendiza de populismo Rosa Díez, que ni siquiera será un partido de centro, aunque su parecido con la UCD ya apuntan maneras de por dónde puede venir el final sin ni siquiera haber logrado el despegue hacía el inicio ¿Qué se puede esperar de un partido liderado por una persona que un día dice una cosa, que apoyará el aborto y al otro hace la contraria y vota junto a la derecha más rancia.? Y pide que los demás apliquen y se apliquen transparencia, regeneración y métodos democráticos, mientras ella, la Rosa de España, practica la censura a los medios por un lado y aprovecharse de ellos al precio que sea, la imposición y el rodillo implacable a los afiliados críticos, usando el partido como un traje diseñado a su medida, de esos que tanto le gusta lucir para salir en las fotos. Dicen ser los adalides de la Constitución, pues según Rosa ésta garantiza la democracia y la igualdad de todos los derechos de los ciudadanos, y lo primero que proponen es reformarla en profundidad, menos mal que son unos defensores patrióticos a ultranza, porque si llegan a estar en contra no quiero ni imaginar el destrozo que harían, dejan muy claro eso sí, por donde y para qué quieren reformar la Ley de leyes y desde luego que no es para ampliar derechos sociales o ciudadanos, sino, para cargarse los que están ahora recogidos, y el más grave es el intento de cercenar la pluralidad cultural y lingüística de España. Se manifiesta Rosa Díez a favor de la autodeterminación del pueblo saharaui y niega ese derecho a los ciudadanos de nuestro país que lo reclaman, y reclaman del Estado que solucione la crisis pero le niegan que invada la esfera económica de la iniciativa privada, proponiendo medidas ultra liberales que dejan al Pp en la extrema izquierda. Y para rematar esa indefinición que nos quiere mal vender la que sin ella el españolísimo UPyD no existiría, dentro de una calculada estrategia electoral que apesta a populismo, por no decir cruzando la frontera ultra, aprovechándose de sucesos sociales de gran impacto mediático como son los delitos execrables que a todos nos repugnan pero del todo minoritarios de casos de asesinatos, etc., etc., que mejor oportunidad para pescar en tan peligroso rio revuelto que cambiar “más” esa Constitución que tanto dicen amar y defender, pidiendo una reforma del Código Penal para instaurar la antigua e incivil cadena perpetua. Como decía, de adolescente tarareaba el “Qué será, qué será” y después de tantos años gracias o por desgracia de Rosa Díez la volví a recordar pensando precisamente en donde se situaría ideológicamente este partido, hasta que clausuraron el Congreso, que visto lo visto, me vino otro recuerdo de aquellas donde también se utilizaba el qué será, que será, pero éste sin cantar, se trataba de un chiste de Jaimito que se encuentra un paquete abandonado envuelto en periódico y se lo quiere llevar a casa, por el camino se va preguntando insistentemente que qué será, y así todo el viaje sin que en ningún momento le diera por abrirlo, pero respondiéndose a cada qué será, qué será con la posibilidad emocionante e ilusionante de que dentro hubiera algo valioso y cuánto más se preguntaba, más valiosa era su contestación, hasta que llegó a su casa y se lo dio a su madre para que lo abriera y lo enseñara a toda la familia, y mientras la madre lo iba abriendo despacio y con cuidado, Jaimito no cesaba de preguntarle ¿qué será, que será? A lo que la madre le respondió: Una mierda seca empapelá.
Saludando lo de positivo que tiene la posibilidad de que Rosa Díez pueda meter una astilla al bipartidismo asfixiante del que se benefician y defienden el Pp y el PsoE junto a los poderosos, no es menos cierto que es de lamentar que un partido parido para ser la izquierda democrática y civilizada al Pp y la derecha progresista al PsoE ha defraudado en las expectativas generadas.
Che Será, Che Sera, Cheee Seeraaa, Qui lo sa
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